Nunca antes había jugado volleyball playero. De hecho, en esta oportunidad recordé que la última vez que jugué volleyball tendría lugar al rededor del año 1999. Mientras yo y mis compañeros de colegio nos escapábamos de las clases de educación sexual para practicar este deporte.
De igual manera recordaría por que rayos es que no me gustaba mucho el volleyball. Varías heridas en mis dedos se encargarían de recordarme que para alguien que depende de su uso para trabajar y, que no tiene la menor técnica para jugar no debería arriesgarse a golpear el balón. Así mismo la arena no es la mejor compañera para practicar este deporte ya que el cuerpo nunca está en una posición cómoda.
En todo caso, no puedo negar que la pasé muy bien. No tuvo que ser un día soleado ni nada similar para que disfrutara esas dos horas que me ayudarían ciertamente a salir del encierro y el estrés que la cercanía con los exámenes genera.
Nunca he jugado volleyball. Sólo baloncesto. Por no saber siempre que le doy a un balón de VB me pego durísimo :-)
ReplyDeleteEspero descanse.
definitivamente arbol que nace torcido nunca su tronco endereza!!!!!
ReplyDeleteyo tambien soy de los que se pega duro jugando voleyball, pero la tactica sencilla y nunca me falles es: dele con los deditos:D:D:D
ahora si a ud le duele eso, creo que si tiene un problema serio de motricidad......
RELAX fresco que dentro de poco se va a poder rascar la patrocinada por aguila
ay, aquello del volleyball es tan poco compatible conmigo (en general todo deporte lo es).
ReplyDeletea mí siempre se me hizo un deporte inhumano, el enfermo que se lo inventó tenía que odia mucho a la humanidad. he dicho.
y no lo digo porque siempre haya apestado en todo deporte, es que en serio es absurdo.
Me dio la nostalgia. Es que por cuestiones laborales tuve que abandonar una actividad cuasi-deportiva que me gusta mucho.
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